Viernes, 12 de enero de 2007
BMW X5
En la vanguardia tecnológica
El nuevo X5 contará con tres motores distintos. Dos de gasolina y uno diésel. Además, ofrece una tercera fila de asientos en un concepto de habitabilidad sin precedentes dentro del fabricante alemán.
CÉSAR URRUTIA
MADRID.-Tras dar el campanazo con su primer todocamino, a BMW no le ha quedado otro remedio que forzar la máquina para que la segunda generación del X5 venza a sus rivales y convenza a sus conductores. Siete años después de su primer lanzamiento y con más de 600.000 unidades vendidas, el X5 se encuentra con que la oferta de todocaminos es mucho mayor de lo que era a finales de los años 90.
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Los ingenieros de BMW han aumentado el tamaño de la nueva versión con relación al anterior. En concreto, la segunda generación del X5 es 18,7 centímetros más larga y 6,1 centímetros más ancha. Estos cambios también han afectado a la distancia entre ejes, que crece poco más de 11 centímetros. La variación de dimensiones da algo más de aplomo al vehículo, manteniendo la deportividad , sobre todo en el frontal.
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Quizás por el éxito que ha supuesto para una compañía que hasta el lanzamiento del X5 se centraba exclusivamente en la producción de berlinas, los cambios percibibles a primera vista quedan ahí. Por eso, la verdadera transformación se ha dado en el interior.
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El nuevo X5 también ofrece una tercera fila de asientos en un concepto de habitabilidad que en general evoluciona más hacia el lujo que a la deportividad que expresa el exterior.